En la contemplación de estas imágenes, contando con la inestimable guía de los comentarios que destacados personajes de la vida cultural madrileña han preparado, se puede apreciar el paso del tiempo por las calles y las gentes de esta Villa. Algunos edificios no existen, otros permanecen inalterables, las fuentes que se movieron por las calles, puertas que ya no son puertas, el paisaje urbano tan diferente del que hoy contemplamos. Además de la aportación de datos gráficos para la historia de Madrid nos parece un material interesante para suscitar la reflexión en aquellos que se asomen a estas páginas. no hace tanto tiempo de estas imágenes que nos podrían parecer de otro planeta y desde luego de otra ciudad. Pero Madrid conserva algo de ese encanto de las escenas callejeras que muestran las fotografías, aunque no queden tranvías, ni se pueda pasear por la calle de Alcalá entre los carros, los tranvías de mulas y los coches de caballos, ni recorrer la ribera del Manzanares a la sombra de los magníficos puentes históricos.