Lou no se gusta cuando se mira al espejo. Tampoco le gusta su trabajo, y cada vez menos su marido. Su madre consigue anular su personalidad y su mejor amiga es algo tóxica. En la sala de espera del dentista lee un artículo que la impulsa a hacer limpieza general en su vida. Empieza por los cajones de la cocina, sigue por su armario, continúa por una habitación, luego otra, el sótano, la buhardilla, el jardín? Se deshace de todo lo que no le gusta, lo que no le sirve, lo que no se pone, lo que no tiene arreglo, lo que no ha necesitado en los últimos meses? Y cada vez que tira la basura se siente más ligera y descubre que el orden tiene un efecto mágico: organizar su casa está acabando con el caos de su vida. Por fin Lou se siente más segura y poderosa.