Se cierra la puerta del despacho de la alcaldía de Barcelona. Jordi Hereu se sienta en una butaca y respira hondo. ¿Cómo se siente un político obligado cada mañana a luchar contra propios y extraños? ¿Qué le anima a nadar a contracorriente para superar una imagen pública que ha sido cuestionada y caricaturizada hasta la saciedad?Gracias a una prosa ágil y certera, la escritora Emma Riverola nos introduce en los diferentes escenarios, públicos y privados, de la vida de Jordi Hereu. Como un testigo invisible, acompaña al alcalde en su despacho en la plaza de Sant Jaume, pero también en el salón de su casa en Les Corts, en el coche oficial, transitando por las calles de la ciudad o en las oficinas de la sede central de la dirección del PSC.La autora entrelaza entrevistas, conversaciones, descripciones, críticas o elogios para descubrir la visión más íntima de un político expuesto, criticado y cuestionado por sus adversarios y por no pocos de sus compañeros. Y repasa los temas centrales, a menudo incomprendidos, de su mandato. Un reflejo de los días convulsos del socialismo catalán.