El perpetuo exiliado reconstruye la figura de Velasco Ibarra, el cinco veces presidente que acabó otras tantas en el exilio, en el marco de una escena política convulsa y una historia de amor única. La figura de José María Velasco Ibarra se ha ido difuminando en la leyenda. De su vida y su proyecto político se recuerda poco, salvo el hecho -impresionante, sí- de que llegó cinco veces a la presidencia del Ecuador y de que el destino de esta gloria fue siempre el destierro. Contra esta fácil simplificación se erige El perpetuo exiliado, novela en la que reaparece el político de carne y hueso, idealista y represor, portavoz de los anhelos de su pueblo y facilitador del poder oligárquico, así como el romántico enamorado de la poeta argentina Corina Parral, la mujer que lo acompañó en sus exilios. En la escritura de esta novela collage está imbricada una historia de amor en cuarenta años de historia política del Ecuador, pero el Velasco Ibarra de estas páginas, como señala el autor, no pertenece tanto a la historia como a la literatura. El jurado del Premio Internacional de Novela Héctor Rojas Herazo:
«Se está galardonando la fuerza de su argumento y su extraordinaria investigación, toda vez que ella en sí es un tratado de literatura y geopolítica». El jurado del Premio RAE 2018, presidido por el director de la RAE Darío Villanueva:
«por ser una reconstrucción meticulosa, desde el punto de vista personal y político de la figura del expresidente ecuatoriano José María Velasco Ibarra, en la que se han integrado con destreza la crónica histórica y la ficción literaria.»