A medida que se acerca a los cuarenta años, la protagonista femenina se siente
cada vez más insegura respecto al enfoque de su vida: se le va consumiendo el
tiempo y no acaba de encontrar una felicidad que identifica con el amor. Por
casualidad recupera una oportunidad perdida, la de reanudar una antigua relación,
y se lanza a por ella.
A través de una serie de coincidencias deliberadamente exageradas, que son
una metáfora del azar omnipresente en nuestras vidas, los pasos de la protagonista
femenina se entrecruzan con los del protagonista masculino, un ser también
inseguro y herido. En las vivencias de él se trasluce otro tema universal: la
relación entre padres e hijos y el paso a la edad adulta, con las dosis de transgresión que ello requiere.
Mientras el relato de él avanza en el tiempo, el de ella retrocede: su tiempo está
?invertido?, la historia va del presente hacia el pasado. Jugando con las palabras,
el título de esta novela evoca tanto esa inversión cronológica como, a la vez, la
búsqueda de la felicidad en la que todos empleamos nuestros años de vida.
Con esta obra, su primera novela, María José Menéndez Arias resultó finalista
en 2015 del III Concurso Internacional de Narrativa para Escritores Noveles
?Manuel Díaz Vargas?.