¿Habéis tropezado alguna vez con un duende? Utinghami es uno de ellos. Todo el pueblo está triste y los niños no ríen, ni cantan, ni juegan... La tía Magaña, la bruja, les ha robado la luz de la imaginación. Utinghami conducirá a Eulalia por caminos de fantasía entre la niebla, y la ayudará a recuperar la imaginación para que pueda devolver, con ella, la alegría a su pueblo.