El grupo editorial Vimar no pasa por su mejor momento. Su directora, Beatriz Álvarez, acuciada por las deudas, piensa que es el mejor momento para que Alejo Novoa, el autor fetiche de la editorial, vuelva a publicar. Desde los años ochenta no se ha vuelto a saber nada de él en el mundo literario.Inesperadamente, Novoa da señales de vida, interesado en el trabajo del redactor más gris de Vimar, Daniel Durán, un hombre capaz de imitar el estilo literario de cualquier autor. A Beatriz se le ocurre que podría enviar a Durán a hacerle una entrevista en la que trate de convencerlo para que les ceda otra novela. En el caso de que no lo consiga, siempre podría hacerse pasar por él.