¿Quién dijo que todo está perdido?
Un manifiesto humanista
Nuestro presente tecnológico lleno de incertidumbre lleva a una eclosión de ansiedad y de deshumanización y a que proliferan los agoreros del futuro. Pero la solución la podemos encontrar en forma de canción de Mercedes Sosa, "¿Quién dijo que todo está perdido? Yo vengo a ofrecer mi corazón".
Y es que cada vez que ofrecemos nuestro corazón, siempre que nos brindamos a los demás, contribuimos de manera decisiva a construir un mundo mejor.
Este libro es una invitación a que des un paso adelante y ofrezcas tu corazón, apostando por iniciativas de luz. Porque cada vez que nos entregamos a una causa llena de sentido nos sentimos reconfortados, notamos un estallido de alegría que nos alimenta y que nos reconecta entre nosotros como especie, primos-hermanos de un mismo mundo.